Una arenadora, también conocida como chorro de arena, es una herramienta que utiliza un chorro de partículas abrasivas, como arena u otros materiales abrasivos, para limpiar, desgastar, pulir o dar textura a una superficie. Estas máquinas son comúnmente utilizadas en una variedad de aplicaciones industriales y de bricolaje para eliminar pintura, óxido, suciedad, incrustaciones y otros contaminantes de superficies metálicas, de madera, plástico, vidrio y piedra.
Las arenadoras pueden variar en tamaño y complejidad, desde unidades portátiles de mano hasta equipos industriales estacionarios más grandes. Funcionan mediante la generación de un flujo de aire comprimido que impulsa las partículas abrasivas a través de una boquilla hacia la superficie que se está tratando. La presión y el tipo de material abrasivo utilizado pueden ajustarse según el trabajo específico que se esté realizando.